Como padres y madres, os habréis planteado alguna vez: ¿qué es eso de TDA o TDAH?¿Qué es una dislexia, una discalculia o una disgrafía? ¿Cómo influye eso en mi hijo/a? ¿Cómo le puedo ayudar?

En muchos casos os encontráis con estos “diagnósticos” en los informes psicopedagógicos del centro escolar sin saber muy bien qué significan o qué hacer con ello. Esto suele generaros dudas, incertidumbre, impotencia... Es como si de repente no conocierais a vuestra/o hija/o.

Y es que realmente poco podéis hacer solo con estas etiquetas o diagnósticos. Es necesario conocer mucho más de vuestra/o hija/o para realmente averiguar cómo ayudarle.

Por eso, en Landa Psicología vamos más allá de la etiqueta. Valoramos cada componente detrás de cada diagnóstico para poder dar respuestas concretas a la configuración única de cada niño/a.

Leer no es una tarea simple. Hay muchos componentes que influyen en esta habilidad, tanto cognitivos como sensitivos y emocionales. Es necesario averiguar cuál o cuáles de todos los componentes implicados está/n afectado/s para entender las dificultades concretas del niño/a para leer y buscar el tratamiento adecuado. Decir, por ejemplo, que tiene dislexia y tratarla en general, puede suponer realizar un tratamiento estéril o ir probando un tratamiento tras otro, lo que suele frustrar enormemente al niño/a y a su familia.

Esto sucede de la misma manera con cualquiera de los problemas de aprendizaje que engloban las etiquetas que comentábamos.

Desde Landa Psicología partimos de la idea de que una buena evaluación es importante y vital para dar la respuesta terapéutica adecuada a las dificultades del aprendizaje y adaptación escolar. Pensamos que las recetas no valen para todos/as y una mirada completa a la persona en concreto y a cada una de sus características es esencial a la hora de tener éxito terapéutico.

Sabemos que una buena evaluación conlleva analizar cada uno de los aspectos o componentes implicados en los procesos de aprendizaje. Es decir, es importante evaluar la atención, la memoria, el lenguaje, las funciones ejecutivas y todos los demás componentes específicamente para poder definir con claridad dónde se encuentra el problema y abordarlo con certeza.

Por eso, os ofrecemos:

• Evaluación

• Intervención

• Asesoramiento familiar

• Terapia familiar en caso de que fuera necesario.

Con profesionales especializados en cada área.